Se sabe que las organizaciones o comercios giran alrededor de sus propias rutinas, por eso el primer desafío que les propongo para este año es lograr que los recursos de su comercio sean fuertes y de ventajas competitivas.
Es decir, deben ser difícilmente imitables por su competencia y útiles para aprovechar oportunidades y neutralizar amenazas, como ya les anticipé en las columnas anteriores.